¡Finalmente! ¡Sólo 5 tips para que tu intestino esté sano y feliz!
Una publicación que resume todo lo que te he venido contando hasta ahora de manera simple y concreta. Justo y necesario, ¿cierto?
La pregunta para mí es: Ale, ¿cómo vas a hacer para resumir TODO en sólo 5 tips? ¡Hay tanto por hacer por ese órgano aún incomprendido!
Pero VAMOS, intentaré no marearte.
TIP N°1
* Evita el azúcar y los ultra procesados:
Básicamente porque son alimentos que están relacionados con el desequilibrio de los bichitos que viven dentro del intestino, es decir, la MICROBIOTA.
En término generales, debemos tener más bacterias que otros microorganismos (hongos, virus, parásitos) en el intestino. Cuando basamos nuestra alimentación en ultra procesados, las bacterias no logran alimentarse de manera adecuada y empiezan a manifestarse otros bichos, como los hongos, que aman el azúcar.
Todo esto lleva a inflamación de las mucosas, mala digestión de alimentos, mala absorción de nutrientes y síntomas desagradables a TODO NIVEL (no solo digestivo).
TIP N°2
* Evita el agua de la llave:
Seguro te acuerdas que hablamos de esto… Al agua de la llave le agregan cloro para hacerla apta para el consumo humano. El lado positivo de eso, es que sabemos que no vamos a morir de alguna infección pero, el lado negativo, es que ese cloro no solo mata los bichitos malos que puedan estar presentes en el agua, si no también, las bacterias que viven en nuestro intestino.
Y eso, obviamente, no es nada bueno, ya que nuestra MICROBIOTA es clave para que todo funcione de manera adecuada en nuestro cuerpo.
TIP N°3
* Come plantitas:
Tranquil@, no hablo de las flores de tu jardín (a no ser que sean comestibles jeje), pero sí que cada vez que vayas a la feria o hagas el pedido a tu casero de confianza, elijas verduras, hortalizas y frutas de distintos colores.
Trata de modificar tu lista de compras todas las semanas para agregar algo nuevo a la típica ensalada de lechuga y tomate, y trata de elegir vegetales de temporada.
También te sugiero incluir legumbres, cereales integrales como la quínoa, frutos secos y semillas en tu semana. Sus fibras son TREMENDO alimento para tus bacterias. De verdad te lo agradecerán.
TIP N°4
* Duerme de 7 a 8 hrs cada noche:
No te puedes imaginar lo importante que es el buen descanso para tu microbiota. Durante la noche el cuerpo entero está dedicado a cumplir funciones distintas a las que hace en el día. De hecho, hay muchos órganos que deberían “descansar”, como el intestino, para que otros, como el hígado, trabajen duro.
Pura sincronía… Hermosa y perfecta… Para que todo funcione de mil maravillas. Por eso, tienes que ayudar a esa MÁQUINA PERFECTA llamada cuerpo humano.
Si tu calidad de sueño no es de lo mejor, investiga qué puede estar pasando y trabaja en tu HIGIENE DEL SUEÑO para que puedas empezar a descansar como corresponde.
TIP N° 5
* No te olvides del movimiento:
Me refiero a todo tipo de movimiento, no solo el ejercicio programado que te lleva al gimnasio algunas veces por semana.
De hecho, te sugiero que elijas actividades que te motiven, no aquellas que tengas que hacer por obligación “porque el ejercicio es saludable”. Aunque es cierto que el ejercicio trae beneficios a la salud, no todo es físico. Por lo que si logras encontrar una actividad que mueva tu cuerpo y tu alma, liberarás tantas hormonas que hasta tu microbiota saltará de felicidad.
Y, por supuesto, puedes aprovechar esos ratitos libres para salir a caminar, ir al trabajo en bici, bajarte antes de la micro. ¡Todo eso suma!
Recuerda siempre… ¡El cuerpo está hecho para moverse! Y el movimiento beneficia la diversidad de tu microbiota, por lo que, tu cuerpo entero funcionará en todo su esplendor.
¡Aplausos! Creo que logré resumir todo lo que necesitaba decirte.
¿Qué te parecen estos tips? Sin duda puede ser difícil lograr hacer tantos cambios de una vez, pero empieza de a poco. Para tu organismo cada pequeño cambio cuenta.
¡Nos leemos la próxima!
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